9 jul 2010

Marcos Paz




Ayer fuimos a visitar a Roberto Martino a la cárcel de Marcos Paz, con el dip. J. Cardelli, de Proyecto Sur, y la amiga Maristella S. Aunque, en lo personal, creo que la marcha en la que participó RM (y que dio motivo a su detención) fue erróneamente concebida, desde casi todo punto de vista, estoy convencido de la absoluta inocencia de RM, piquetero no-genuflexo frente al gobierno. La Cámara que estudia su caso está por tomar una decisión, y desde aquí pedimos por la liberación del preso político RM quien, más allá de errores que le podamos marcar, y de las diferencias que tengamos con él, es un ejemplo de compromiso de lucha, por la causa de los que están peor.


P.S.: Dicho lo anterior, una palabra más sobre la cuestión carcelaria. La cárcel de Marcos Paz, situada a hora y media del centro de la ciudad, en un descampado de difícil acceso, y al que se termina llegando por una incómoda vía de tierra y piedras, es otra muestra de la verguenza del régimen penitenciario argentino (aunque bien podría decir: una buena muestra de casi cualquier régimen penitenciario en América). Pensar que el modo de "reintegrar" a los detenidos es a través del "aislamiento" de los mismos respecto de quienes los aprecian y pueden darle afecto, es un simple ejemplo más de la irracionalidad con que está concebido todo el sistema penal-carcelario.



13 comentarios:

  1. Anónimo4:40 p.m.

    http://www.youtube.com/watch?v=JXHB2dnd42Q

    ResponderBorrar
  2. Anónimo6:59 p.m.

    Me parece que este señor martino mientras este preso tendría que dedicarse a cultivar su intelecto, su discurso, muy común en cierta postura progre, acusa al sionismo de todos los problemas y reivindica a irán, seguramente tiene una fórmula para una solución final. Este país da para todo. Nada mas lejos de este blog que ese tipo. Lucio.

    ResponderBorrar
  3. Si pueden manden un saludo a Roberto Martino, una presa más de este Gobierno que lucha contra el "antisemitismo".

    ResponderBorrar
  4. Roberto,

    Siguiendo con el tema del matrimonio homosexual si el unico argumento a favor seria la igualdad en que sentido esta no seria una noción de bien que se impone a la sociedad sino lo justo desde un punto de vista político? No podríamos estar cayendo en ese sentido en el mismo error de fondo que los detractores del matrimonio homosexual es decir instrumentalizar la política para imponer una noción de bien en la sociedad?

    Saludos.

    ResponderBorrar
  5. Anónimo8:58 p.m.

    disiento en la "irracionalidad" del sistema penal-carcelario; me parece de una idea de lo mas razonada, una maquinita bastante aceitada. Alejandro Slokar en su "clínica de la vulnerabilidad" hablaba de tres niveles: selectividad, deterioro y estigmatización. Quizás lo que diga parezca sarasa, pero nadie puede negar que ese es el modelo sudamericano.

    cristian

    ResponderBorrar
  6. bueno, Marcos Paz es donde estuvo internado el amigo Santos Godino antes de sus crimenes celebres, no creo que haya cambiado demasiado.

    ResponderBorrar
  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderBorrar
  8. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderBorrar
  9. Lucio, claramente, rm no es antisemita, ni mucho menos, pero si creo, con vos, que la marcha que convoco fue un error.

    cristian, entiendo. digo irracionalidad en cuanto a que invoca reintegracion, aislando

    nicolas, la igual dignidad, el hecho de que todos valemos lo mismo, es simplemente el punto de partida. justamente es la negacion del derecho de nadie a imponerle su plan de vida a los demas

    ResponderBorrar
  10. Profesor:

    Buenísimo. Estos posts no deben faltar, es imperioso recordar todos los días esta horrorosa violación a los derechos humanos que son las cárceles. Hay que recordar que no sólo son asbolutamente ajenas a todo tipo de trato que necesita y merece un ser humano, sino además no responden a fin alguno: nadie sale mejor de la cárcel, a nadie le sirve que existan las cárceles. Es una de las actitudes más pueriles de las sociedades actuales, es un patear la pelota, un esconder el problema en el cajón.

    Quisiera saber si Ud. escribió algo sobre el tema, ya que si bien leí varios artículos suyos de libertad de expresión, nunca leí uno que trate directamente esta problemática.

    Saludos,

    ResponderBorrar
  11. si, tengo un librito se llama de la injusticia penal a la justicia social, publicado por siglo del hombre, colombia

    ResponderBorrar
  12. Anónimo11:26 a.m.

    alguna vez te leí acerca de un trabajo en preparación sobre condiciones de socializacion previas a fundar la legitimidad del estado para intervenir mediante el sistema penal; acaso lo publicaste?

    cristian

    ResponderBorrar
  13. Estuve en el penal para ver a los campesinos paraguayos presos, a los que se le ofreció asilo de "boquilla" y cuando llegaron acá los metieron en cana. Horrible, espantoso el acceso, caro (para llegar, no es que yo haya pagado porque me llevaron en auto, pero no queda cerca de nada y eso tiene siempre precio).
    No hay duda que está concebido como un castigo más allá del supuesto delito que se cometa, y además allí se interna a quienes no han sido condenados aun (el caso de los campesinos paraguayos fue mil veces peor por todas las connotaciones de encarcerlar a recién llegados con la ilusión del asilo). Y la verdugüeada que les tocó por la huelga de hambre, etc.)
    Un saludo
    Gonzalo

    ResponderBorrar