21 nov 2008

Obama y la apatía política



Está claro que he quedado obsesionado con el fenómeno Obama. Sin embargo, aclaro para los pesimistas, mi obsesión tiene poco que ver con él como candidato o como presidente, y mucho más que ver con lo ocurrido, con lo que nos da para pensar lo que ya pasó. Es una obsesión sociológica, que se relaciona con la comunidad, y no con el individuo -ni él ni cualquiera.

Hace décadas que comentaristas, periodistas, cientistas sociales, vienen hablando cantidad de tonterías, como las relacionadas con la apatía política. La apatía en el mundo, y en particular en los Estados Unidos, reino del individualismo extremo. Se escribieron millones de páginas sobre el tema, sólo dedicadas a explicar lo que se asume como dado -no para reflexionar sobre la cuestión, considerando al objeto de estudio como abierto. La pregunta es por qué la gente ES apática, presumiendo que ese estado político es un dato de la realidad.

De repente aparece un candidato que -aunque mienta, aunque mañana traicione todo lo que dijo, aunque ya sea un traidor, no importa en absoluto!- dice algo que parece verdadero, toca fibras no tocadas, muestra un poquito de dignidad y...millones de personas se entusiasman, cientos de miles donan dinero y tiempo a su campaña, padres se movilizan con sus hijos de un estado a otro para colaborar, miles y miles de voluntarios se van a barrios marginales a golpear puertas y convencer gente, algunos lloran, vuelve la emoción, uno siente una vibración especial en las calles.

Todo eso es lo contrario de la apatía política, es lo que la teoría de la apatía niega que pueda pasar, es lo que los teóricos de la apatía reconocen como fenómenos del pasado: en este mundo la gente ya no se moviliza por política, sólo toma cerveza frente al televisor.

Y no, no es así. Pasan un montón de otras cosas. Y decir esto es compatible con que mañana nos desilusionemos, o ya lo estemos, con que lo viene sea pura traición, con que el fenómeno haya conmovido a solo una parte del país, con que haya millones de republicanos e indiferentes intocados. No importa nada de eso. El punto es que lo que se preveía con suficiencia que ya no podía ocurrir resultó ser una tontería. Que hay millones de personas dispuestas a movilizarse y emocionarse por causas que les entusiasman, digan lo que digan los teóricos del escepticismo.

Resulta entonces que el problema no es tanto que la gente se convirtió en ameba, sino que hay demasiada mentira dando vuelta, demasiadas propuestas degradantes, vendidas al enemigo, poco creíbles, demasiado marketing apuntando al votante medio, demasiado cálculo, demasiada desconfianza en el valor de decir alguna verdad. Caramba.

15 comentarios:

Martín Juárez Ferrer dijo...

me encanto tu enojo, y el "caramba".
muy bueno,
saludos,
martín

rg dijo...

hola martin, gracias, muy bueno lo tuyo

Natalia Sobrevilla dijo...

diste en el clavo, para mi este es el mayor merito de Obama. La gente creyó, la gente actuó y sintió que trabajar en conjunto valía la pena. El riesgo claro me parece grandísimo, habiendo logrado que tantos vuelvan a creer el desengaño puede ser feroz. Creo que la mayor prueba de su capacidad de presidente será si logra mantener el convencimiento de esos tantos de que vale la pena seguir trabajando en conjunto. Veremos.

Anónimo dijo...

Cierto, nunca antes una elección presidencial en Estados Unidos despertó tantas expectativas, encendió chispas de esperanza y movilizó a tanta gente. Las condiciones del escenario estaban dadas: una plaga de vicisitudes (la guerra en Irak, crisis hipotecaria, financiera, etc.), y una sociedad carente de liderazgo. Además de un chivo expiatorio y propiciatorio, Bush. Todo esto requería un plan estratégicodel establishmente para recuperar la confianza en el sistema, sobretodo la confianza de la golpeada clase media. Recuperar la grandeza de la nación en los inicios del siglo XXI globalizado. En otras palabras, revivir el Destino Manifiesto --el mundo para los americanos. El perfil político y cultural de Obama cataliza estas ilusiones. Con estos ingredientes, Obama obtiene un primer triunfo. Si bien, 'una reserva de verdad y un poco de dignidad' ayudan. El 'cambio' requiere más que retórica y política usada y usual. Con saludos cordiales.

mm dijo...

caramaba rg, me gustó el post!
un clásico de la sociología como weber, recuperaba la figura del líder carismático como posibilidad política frente al proceso de racionalización creciente del mundo. Claro que pueden citarse tantos teóricos más, e incluso integrar el “fenómeno Obama” a las circunstancias que lo hicieron posible para desacelerar la radicalidad que supone un momento carismático. Pero la verdad es que tengo ganas de pensar, y no me importan las bibliotecas que puedan objetarme por el simplismo, que uno se moviliza cuando cree en algo. Y en esto, tienen que ver y no, los momentos de movilización social.

Si hay sueños, si hay proyectos personales, uno está despierto y está movilizado, está buscando la forma de hacerlos posibles. Y es aquí en donde se conjugan política y poética como momentos tanto personales/subjetivos, como sociales/procesuales y en donde la convergencia es radicalmente potente.

Y pensando convergencias y radicalidades, pienso en los estilos de escritura como giros hacia alternativas de expresión intelectual. y suena más que interesante- para despertar del escepticismo a las ciencias sociales que se nos parecen cada vez más a una ameba que bebe cerveza mirando televisión-, recuperar al “ensayo” como escrito político y como pulsión cultural, en reacción abierta al "paper académico" tan desencantado, estilísticamente regulado, aparente portador de un rigor intelectual del que estaría aparentemente desprovisto el “ensayismo".
saludos,

Anónimo dijo...

Roberto, escriba algo sobre el fallo de la Corte, que hace falta...

rg dijo...

cual fallo?
mm, de acuerdo. solo que el ensayo tiene que ser compatible con el otro tipo de escritos, supongo que ninguno debiera ahogar al otro, creo que se necesitan en parte. besooo

Anónimo dijo...

¿habrá habido el mismo entusiasmo en Bolivia cuando Evo Morales? ¿serán fenómenos comparables? A parte: algunos ensayos, tan de moda en ciencias sociales, suenan poco riguroso y antojadizos. Creo que tanto el desencanto como el entusiasmo admiten diversidad de estilos.

mm dijo...

Guau! anónimo, vives en latinoamérica? Evo Morales despertó expectativas en qienes miramos desde el otro lado de los límites y preocupación en quienes no lo comparten. Fenómenos comparables.te lo propongo como ejercicio para que organices tu propia respuesta.
a)tipo y estructura de la coalición b)dirección del movimiento c)contenidos de las propuestas d) sectores movilizados e)articulacion y estructura de los sectores de oposición.f)contexto g)características del proceso electoral ( con o sin polarización social? h)acción comunicativa

Y qué salva de lo antojadizo y mediocre al escrito académico? no me digas que es la rigurosidad de la cita al pie? abrazo,

rg dijo...

si es antojadizo y mediocre no lo salva nadie, se trate de paper, ensayo, blog. pero en los papers uno aprende mucho, yo al menos aprendi, creo, muchisimo, sobre miles de temas, millones de cosas

Anónimo dijo...

mmm: sì, otro eje a comparar, pienso, sería cómo repercute (qué fea palabra!) y en dónde lo que pase en uno y otro proceso y quiénes los leen e interpretan... ¿"acción comunicativa"? ¿te referís a las estrategias de comunicacion política ¿no? lo de Junger...no sabría cómo acomodarlo aquí...sabemos que Evo no usa youtube para sus discursos!! Sí me entusiasmó Evo, sí, vivo en LA (Latinoamérica)y encuentro pocás cosas (artículos, comentarios, discusiones)sobre el proceso boliviano (también suena mal!) quizás me puedan recomendar. Y también me parece que una cuestión es la calidad, otra el estilo o el género y, en mi opinión, hay relación entre la cita y la rigurosidad (aunque la cita puede ser inventada, claro, pero soy más bien crédula) Mi comentario venía a cuento de que, me parece, hay ensayos de buena o mala calidad y escritos con y en favor del desencanto o del entusiasmo, como pasa con los trabajos académicos, los cuentos, las novelas, las películas...Digo que el género no te asegura nada y sí, yo también estoy aprendiendo mucho de los trabajos académicos y los ensayos y las películas y las novelas y los cuentos y los sitios web

Anónimo dijo...

Jurgen, Jurgen,Jurgen y con dos puntitos, perdón, perdón,

mm dijo...

rg, coincido con vos, claro que también he aprendido muchísimo de la lectura de papers académicos; ensayo y papers son dos estilos necesarios. Pero ahí esta el punto – también contigo anónimo – en donde me distancio pero para marcar justamente que en los últimos años la tradición académica relegó al ”ensayo” casi a un lugar de un “no saber” , como carente de rigurosidad, punto desde el cual se define el papers académico como poseedor de los atributos que al ensayo se le restan. Cuando en verdad, el ensayismo, es un estilo de escritura posicionada desde donde se interpela a la realidad. Estilo que tuvo un desarrollo prolífico en la crítica cultural y política ,y en Argentina con una tradición riquísima e interesante que, lamentablemente para mí, en nuestras universidades se ha dejado de alentar.
besoopp

Anónimo dijo...

ok, no sabía que en Argentina se lo desalentaba, saludos

Unknown dijo...

Coincido totalmente,, este fenomeno obama deja las puertas abiertas para que la gente vuelva a participar, a sentirse parte, y por sobre todo a creer que con la participacion activa se pueden cambiar las cosas