6 abr 2012

Amor y guerra. Chicago III



Llegué a Chicago en los 90, en tiempos de Rodney King -el levantamiento de los afroamerican, luego de que un joven negro fuera apaleado por la policía. En las calles no se sentía amor, sino odio racial. Sobre lo primero, mi ricordo que, al tiempo de estar aquí, en la fuente externa de la Facultad de Derecho vi un acto lujurioso, el escándalo, la pura lascivia: una pareja (ellos eran croatas), besándose. Ahí me di cuenta: luego de dos años, era la primera vez que veía a dos jóvenes compartiendo su amor en público (ah, el public display of affection!). (Debo reconocer que en estos dos días tampoco he visto manoseos impertinentes frente a todos). Sobre el odio, recuerdo que el mismo día en que estalló Rodney King, un joven estudiante, compañero de clases y desafortunado en el amor, fue rociado con nafta por una patota afroamericana, mientras caminaba junto al lago con, por fin, una compañerita de clases. El amigo se salvó miracolosamente, la policía y la televisión llegaron de inmediato, lo entrevistaron, y lo primero que le preguntaron fue cómo eran los atacantes, qué aspecto tenían. Él, con gran dignidad, decidió no alimentar a los leones. Dijo entonces: "No pude verlos, era de noche, no sé cómo vestían ni qué color de piel tenían."

No hay comentarios.: