Que el juez Moro haya aceptado trabajar como Ministro de Justicia de Bolsonaro me parece inaceptable e injustificable. No porque no se pueda pasar de la Justicia a la Política, ni porque no se puede intentar "cambiar las cosas desde adentro." Pero...no él, no ahora, no con él. La decisión no invalida la investigación anterior, ni la condena a Lula, pero genera lo que en Argentina genera el "factor Bonadío": contamina gravemente una investigación que tiene apoyo "material" y razones jurídicas, al punto de generar sospechas graves y razonables sobre hechos de corrupción ciertos. Algunos insisten con "Moro inocente, Lula culpable," otros con "Lula inocente, Moro culpable." Para mí, como suele ocurrir, todo lo malo es cierto: cierta la corrupción de la política, cierta la "animosidad" injustificada de la justicia. Sopa otra vez.
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4 comentarios:
Só Pra Contrariar.
Es la versión brasileña de Garzón. Lamentablemente esto le otorga una plataforma fuerte al PT para cuestionar la imparcialidad de ese juez y la objetividad de todas las decisiones que se tomaron en el caso. Un error político gigantesco de Moro condicionado por su desmedida ambición
Como en el caso de Bonadío, el fondo de la cuestión puede ser cierto pero el sesgo político de las investigaciones también,esto no hace más que reafirmarlo.
Garantías e igualdad ante la ley son antiguallas sin valor.
de acuerdo, es lo que dije también: todo lo malo es cierto
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