En el capítulo 6 de su nuevo libro, y en tren de defender la primacía del Congreso sobre el control judicial, Waldron deja en claro que esa afirmación no lo lleva a abandonar la reivindicación de la democracia representativa, por sobre la democracia directa.
Dice Waldron: "Muchos han asumido a partir de mi trabajo sobre la revisión judicial, y del hecho de que esté basado en principios de legitimidad democrática e igualdad política, que por lo mismo debo estar en favor de que las personas, por sí mismas, voten directamente y como iguales a las leyes que van a gobernarlos." Se dice -agrega- que cualquier concesión o limitación al respecto no puede aceptarse porque implicaría (tanto a nivel legislativo como judicial) una delegación de autoridad que deja de lado la participación política del ciudadano común.
Sin embargo, agrega Waldron, tales visiones son equivocadas, porque la representación constituye, en lo que hace a la creación de leyes, una alternativa democrática mejor. Y, en lo que concierne al control judicial, el problema no es sólo el aislamiento en relación con la gente, sino, y sobre todo, su falta de credenciales democráticas adecuadas -que el legislador sí posee.
Para afirmar este punto, Waldron se basa directamente en el trabajo de Nadia Urbinati (profesora también de Columbia University, y gran amiga de este blog), y sobre todo en el libro de Nadia, "Representative democracy. Principles and Genealogy."
En línea con el pensamiento de Urbinati, Waldron sostiene que "la abstracción de la representación implica una forma particularmente apropiada para la creación legislativa, en donde luchamos para la construcción de normas abstractas, abstractas en el sentido de generales -esto es decir no directivas enfocadas en una persona o situación particular...como podría estarlo una decisión judicial, al menos en primera instancia"
Tenemos que ver, de todos modos, más en detalle, sus argumentos. Ya llegamos a ellos.
4 comentarios:
Off topic: Verbitsky y la cuestión de la "justicia" en Jujuy con Milagros Sala https://www.youtube.com/watch?v=0Hevpt1GVGQ
Desde esas premisas las tesis de Waldron pierden parte de su atractivo y pueden transformarse en algo difícil de legitimar. Ya no es la ciudadanía apoderándose de aquello que las elites les habían "robado" sino que serán otras elites las que terminarán arrebatándole ese poder y, para colmo, sin una estructura de control externo que esté en condiciones de ponerle algún límite cierto.
Yo puedo entender tu crítica al control judicial desde la perspectiva de una democracia a la Rousseau. Ahora, desde la órbita de una democracia participativa, la cosa cambia bastante y se transforma en algo inatractivo y peligroso.
contraponer democracia directa a democracia representativa es una falsa dicotomía. La cuestión es si la ciudadanía tiene poder de agenda o el monopolio de la agenda la tienen los representantes. El debate es entre democracia representativa con mecanismos de democracia directa desde abajo y democracia representativa pura sin esos mecanismos o con mecanismos de democracia directa solo desde arriba. sl
no, no me parece. hace cientos de anios que se defiende la democracia representativa en la que vivimos. otra cosa es que nos guste mas o menos, pero desde ese lugar podes hacer una critica profunda al control judicial como el la hace
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