8 dic 2008

Gotas de microhistoria: Pasolini/Agamben



Ayer, frente a los insoportables controles de migraciones, aquí en los Estados Unidos, me acordé de Giorgio Agamben, quien se niega a entrar en este país, en rechazo a ese tipo de intrusiones de..."biopoder." Simpatizo con la actitud, pero me pregunto si no es disparar el tiro en el lugar equivocado. Quiero decir, razones para no entrar en los Estados Unidos o en muchos otros lugares, y para resistirse a participar en actividades de todo tipo, hay muchas y muy buenas, y en general ni pensamos en ellas. Pero, son de este tipo?? No sé...creo que no.

Me acordaba también de que en la película "El Evangelio según San Mateo," de Pier Paolo Pasolini, de quien habláramos hace unos cuantos posts, aparece en un momento el apóstol Felipe-Philippe. El actor que lo interpreta es el mísmisimo Giorgio Agamben, a los 22 años.

13 comentarios:

Lucas A dijo...

What? En serio? Tengo que verlo detenidamente!

Tenemos, todavía, que sacarnos esa duda de un gran filósofo especializado en Schmitt o Hegel que aparece en "Asesinato en el senado"..

Salute, che.
L.

rg dijo...

Bueno, decian eso en un reportaje a Agamben, en Le Monde edicion francesa de hace dos sabados si no me equivoco

rg dijo...

como era lo de asesinato en el senado? desconozco

Natalia Sobrevilla dijo...

esos controles de migraciones siempre me hacen pensar en los que dicen que las naciones son inventos y que la globalizacion ha terminado con ellas. Nada como tener pasaporte peruano y necesitar visa hasta para ir al infierno, para recordale a uno en esos controles migratorios que las naciones seran inventos, pero que existen, existen.

rg dijo...

totalmente, totalmente

Anónimo dijo...

Ese tipo de datos como el de Agamben en el cine me encantan. No se por que.

Alejandro Haimovich dijo...

hace algunas decenas de post comentabamos que hay un jorge dotti en "Asesinato en el senado de la nacion". le preguntamos a g.noriega que pasaba por aqui pero no contesto.

rg dijo...

ahhhhhhhhh

Anónimo dijo...

Es una lástima enorme que las políticas propias hagan tan tan desagradable el ingreso a tu propia casa...

Osea... te mandaste tantos mocos con los vecinos que cada vez que alguno de estos viene a tu casa a arreglarte el inodoro, lo hacés pasar por un detector de metales para controlar que no tenga una ojiva nuclear lista para montar en tu bidet... horrible, qué paranoia!!!

Hablando de fronteras, es tragicómico ver la diferencia de tratos que se le da a la persona en el límite entre Bolivia y Argentina... (no importa la nacionalidad) Sos rubio y carilindo (como es mi caso) y te hacen la vida imposible para ver si te pueden sacar algo, y si sos morochón y con razgos típicos, te hacen la vida imposible para... para...

Hasta ahí llegué, el impulso intelectual fue absolutamente fagocitado por el recuerdo del shock emocional... controles de aduana, dónde se pone el límite a la permisibilidad de dichos controles???

Natalia Sobrevilla dijo...

a mi la verdad me dan ganas de compilar una enciclopedia con eso de los controles migratorios y de aduana, las historias propias y ajenas son demasiadas, pero hasta ahora me he resistido porque las que tengo pasan peligrosamente de las cómicas a las trágicas.

Lucas A dijo...

Eso, eso, lo dijo Alejandro Hache. Gracias Alejandro H.

Zoabra,
Lucas.

Anónimo dijo...

Vivo en una infausta ciudad fronteriza con San Diego, Estados Unidos, y padezco todos los días esos controles migratorios, además de largas demoras para cruzar 'la línea', ya sea en auto o a pie. Para decirlo con Agamben, la experiencia no es otra que una experiencia de 'campo' (de concentración), con sus muros altísimos, coronados con alambre de puás, visas, huellas digitales, permisos, para ingresar al 'sistema' superordenado y al mismo tiempo subordinado. Saludos.

rg dijo...

se entiende, entiende