31 may 2010
Breves desde Colombia
Del corresponsal Juan GB, hoy en Bogotá:
El día había empezado temprano hoy, con una recorrida con amigos por varios centros de votación. Pocas veces he visto tanta alegría y expectativa en la calle, tanta promesa de cambio condensada en el aire. Para un argentino, es decir, para alguien que viene de un país que ha vivido continuas rupturas de la normalidad constitucional, la experiencia ininterrumpida, la estabilidad y madurez política colombiana, producen asombro e inspiran humildad. Con todos sus problemas, que son muchísimos, Colombia tiene mucho para enseñarnos sobre el papel irremplazable de la competencia y el diálogo políticos.
Durante toda la semana pasada (en realidad, los últimos meses) se habían sucedido los debates entre los candidatos, muchos de ellos de enorme nivel, marcados por el respeto y el intercambio de argumentos. Y, nuevamente, el contraste con lo que uno conoce más directamente es muy marcado. Para alguien que viene de un país en el que los debates prácticamente no existen, en el que los gritos y fórmulas vacías suelen predominar en las contadas ocasiones en que los candidatos acceden a discutir públicamente, y en el que los periodistas desconocen el arte de la repregunta, ser testigo de esta experiencia ha sido infinitamente enriquecedor.
Pero, ¡ay!, luego empezaron a llegar los votos. Y los temores de muchos se hicieron realidad. Juan Manuel Santos ganó las elecciones. Va a haber segunda vuelta, aunque faltó muy poco para que no la hubiera. Y con esta diferencia, no va a ser fácil quitarle la victoria. Se especula que buena parte de los votos del derechista Germán Vargas Lleras, quien hizo una buena elección, pasarán a Santos, y lo mismo sucederá con los votos conservadores, e incluso con algunos de los que cosechó el propio Antanas Mockus, la promesa de la campaña hasta hoy. Mockus podría recibir (algunos) votos del Polo Democrático, de la izquierda, y tal vez una porción del voto conservador. Tal vez como sucedía en Argentina con Carlos Menem, y para ocupar un espacio de corrección política, muchos de los que se mostraron a favor de Mockus en las encuestas votaron finalmente por Santos, sea por convencimiento genuino o por presiones, directas o indirectas (se sabe bien lo que significa votar en muchos lugares del país).
Análisis políticos van a sobrar, de gente que conoce la realidad local infinitamente más que yo, pero tal vez las dudas expresadas por Mockus respecto de la posibilidad de una alianza con Gustavo Petro (el candidato del Polo Democrático) puedan haberle sacado votos. Lo que ningún análisis omitirá es que, en definitiva, Santos logró reunir una cantidad de votos muy similar a la que sacó Uribe en 2006 (unos 6.800.000 Santos, y 7.397.835 Uribe). A pesar de que es cierto que la cantidad absoluta de votos ha crecido respecto de 2006, y con ello la cantidad de votos que no fueron al candidato por ahora vencedor, la vergonzosa política uribista parece no correr peligro.
No está todo dicho, claro, y Mockus tiene que lanzarse ya mismo (en términos colombianos, “ahoritica”, no “ahorita”) a una campaña más agresiva, a una campaña distinta. Posiblemente se incline por intentar captar el espacio a su derecha (el espacio, para muchos no enorme, entre Santos y él), pero no debería perder de vista que también necesita el apoyo del Polo y del partido liberal. Por ahora, esto ha representado un trago bien amargo en un día que se vivió (que viví) como los preparativos de una gran fiesta, no por el posible triunfo de Mockus, un candidato que (me) genera muchas dudas (aunque no su honestidad), sino por la derrota definitiva del uribismo. Lamentablemente, esta derrota parece hoy muy lejana.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
25 comentarios:
"Colombia tiene mucho para enseñarnos sobre el papel irremplazable de la competencia y el diálogo políticos".
Si, hay que aprender mucho sobre dialogo en un pais con 53.000 asesinatos politicos en los ultimos 20 años.
me parece que colombia es justamente esa combinacion entre una violencia descomunal, inusitada aun en latinoamerica; y una corte que tambien es inusitada en la region, y que argumenta como ninguna, y toma decisiones que tienen impacto en la realidad; y elecciones que se vienen llevando a cabo con procesos de debate extraordinarios tambien, tambien inencontrables en otros lugares. y creo que seria reduccionista negar cualquiera de estas cosas
y que esperaban? el uribismo gana porque gobierna bien. asi es la democracia muchachos, la que vota es la gente no los filosofos.
De acuerdo con rg; aunque hoy no amanecí con muchas ganas de defender mi país, la verdad es que si somos una extraña combinación; aunque quizás no tan extraña; a diferencia de la mayoría de los paises de la región, Colombia es de forma absolutamente radical, dos paises en uno, uno en la selva y otro en las ciudades; en las ciudades vivimos relativamente bien, con niveles de violencia digamos que aceptables, y con estándares de vida relativamente altos; quién conozca Bogotá lo podrá decir; pero en el campo, o mejor, en la selva tropical que cubre más del 60% del territorio, la realidad es otra, una mezcla de la europa feudal y de Congo; igual creo que las personas de otros paises deberían aprender a juzgar menos y a entender mas; miren el caso de Mexico; en 5 años pasó de ser un país con índices de violencia más o menos normales para la región, a un país con zonas peores que el Medellín de los 80s, como Ciudad Júarez; nadie esta libre de caer en un espiral de violencia como la que genera el narcotráfico y la lucha militar contra éste; lo bueno o lo malo, quien sabe, es que en Colombia nunca se permitieron las dictaduras que invadieron el cono sur en los 70 y que aniquiliaron a toda la oposición política; aquí la violencia política siempre ha existido pero nunca ha llegado al nivel de arrasar con los opositores (salvo casos aislados y pequeños como la UP); a veces en Colombia nos ponemos a pensar si hubiera sido mejor tener una junta militar como la argentina, que hubiera hecho lo que se le diera la gana con el país y acabar con la guerrilla cuando no era tan fuerte; la verdad, es que en Colombia, aunque suene extraño, preferimos honrar nuestra imperfecta tradición democrática, que nos es mucho más que electoral, estamos de acuerdo, pero que por lo menos se resiste, a pesar de las dificultades, a caer en las fáciles mieles de la autocracia.
bueno, cualquier interpretacion que tengan, sobre el increible fracaso en las encuestas, comenten, porque lo que ocurrio -la enorme diferencia entre todo lo que se decia unos dias antes de la eleccion- y la eleccion, ha sido muy dramatico, muy notable, y seria bueno ver que es lo que paso. yo escuche, antes y despues, a varios analistas (muchos uribistas), que erraron sus pronosticos, por mucho, y no sabian como explicarlo
Pues creo que hay dos cosas; la primera es el rigor metodológico de las encuestas; en un país con algo así como 26 millones de votantes habilitados, hacer encuestas con muestras de mil personas no deja de ser poco representativo.
Lo segundo es que los jóvenes nuevos votantes, cerca de 3 millones, no salieron a votar, y su fervor sólo alcanzó para salir con camisetas verdes por los centros comerciales; una reflexión final es que Mockus parece haberse sentido muy seguro de su potencial electoral y despreció cualquier cercanía con el Polo o con el Partido Liberal, y esa faceta excluyente le resto favoritismo entre los indecisos; la otra cuestión es que Mockus se vió poco fluido y claro en los debates televisivos, lo que no deja de ser altisonante en un país donde los políticos casi por defecto, son buenos oradores e improvisadores.
Pero el caso es que nadie esperaba una derrota tan aplastante de Mockus...
tendria que chequearlo bien, pero todo indica que hubo fraude
Fraude??
No creo; pues se habrán dado casos aislados de prácticas como compra de votos, etc.
Pero 6 millones de votos no se sacan solo con fraude; se requiere la "complicidad" de un país enamorado de un modelo autoritario, sectario y militarista.
No hay excusas, los colombianos están embelesados con el uribismo...
Han visto esa película de Dennis Gansel llamada la Ola???
A veces me siento un poco así...
la ficción de pensar que sólo las dictaduras latinoaméricanas son autoritarias y no asi el "gobierno democrático" uribista o chavista no ayuda demasiado. mucho menos la ficción de que la corte constitucional cuyas decisiones "tienen impacto en la realidad".
tal vez demasiado formalismo y nominalismo es lo que no nos deja ver el bosque...
Hola Mariela, comparto lo de formalismo, pero sin darle un sentido peyorativo a la palabra.
Estamos de acuerdo en que la democracia material es más importante que la democracia formal, pero también podemos acordar, que el respeto por las formas es una causa necesaria para la construcción de sociedades materialmente más abiertas, igualitarias y democráticas.
Te pongo un ejemplo: Los EEUU; alguien cree que eso es una democracia libre? por supuesto que no; pero por lo menos personalmente me impresiona la forma como lograron diseñar un sistema de gobierno donde el presidente no hace lo que se le da la gana dado el tremendo poder del congreso.
Una cosa no riñe con la otra; pero como bien lo dice Robert Summers, no se debe despreciar las formas porque es a ellas que les sigue la sustancia, la materia.
Ahora, los malos usos, o abusos de la democracia, como los de Chavez, Uribe y que me dices de la parejita Kichner??, no deben hacernos perder de vista que no es lo mismo una dictadura que una democracia imperfecta; es preferible lo segundo, porque por lo menos puedes putear a quien quieras sin que te desaparezcan en la noche...
"en un país con algo así como 26 millones de votantes habilitados, hacer encuestas con muestras de mil personas no deja de ser poco representativo".
Lo raro es que en todos lados eso si funciona, hace por lo menos 74 anos: http://en.wikipedia.org/wiki/Opinion_poll#History
Perdón, pero estoy casi sin acceso a internet. Anónimo de las 11.19, sí, "Colombia tiene mucho para enseñarnos sobre el papel irremplazable de la competencia y el diálogo políticos". Lo escribí sabiendo que iba a recibir ese comentario.
Como varios dijeron, es un país con enormes contradicciones, o incluso varios países en uno, pero no veo ningún sentido en negar el valor de la continuidad institucional. Especialmente cuando casi todos venimos de países que no la han tenido, y que (también) han padecido formas horrendas de violencia.
Y me niego rotundamente a aceptar que sea una ficción distinguir entre una dictadura y una democracia imperfecta. Basta preguntarle a cualquier colombiano qué piensa de esto. Todos/as dirán que no es lo mismo, tanto los/as que votan a Santos como los/as que votan al Polo. ¿O será que viven bajo una falsa conciencia?
Saludos,
j.
Pues puede que lo de la mil personas sea una metodología extendida, pero también puede pensarse que en una contienda electoral con 9 candidatos, donde al menos 4 sacaron votaciones importantes, la metodología deba ser otra; quizás funcione en sistemas bipartidistas, pero en este caso claramente no funcionó.
Igual estoy de acuerdo con Anonimo en que por sí sólo, la cuestión del tamaño de las muestras no explica la diferencia tan grande con las cifras reales...
Luis Enrique Reyes Moreno:
"salvo casos aislados y pequeños como la UP)" (!)
"Aislados" y "pequeños"?
"nadie esta libre de caer en un espiral de violencia como la que genera el narcotráfico y la lucha militar contra éste"
Me parece que la violencia en Colombia no empieza ni termina con la "lucha militar contra el narcotráfico", que, btw, habría que ver si, como vos parecés suponer, debe ser una lucha "militar"; e, incluso, si debe ser "lucha"...
(Recientemente hojeé un poquito el libro "Drogas y Prohibición" de J. G. Tokatlian:
http://www.ellitoral.com/index.php/diarios/2010/04/27/opinion/OPIN-02.html
Y sé que está "Smoke and Mirrors. The Paradox of the Drugs War" de J. Malamud Goti).
Aclaraciones:
Lo de la UP fue terrible, un genocidio dirigido desde el Estado, una vergüenza para este país y para la región que miró inconmovible cómo ocurría; a lo que me refiero es que afortunadamente este genocidio fue totalmente ineficiente como forma de aniquilación de las visiones contrarias al establecimiento y de ahí su carácter aislado;
Respecto al narcotráfico, creo que de ninguna de mis palabras se extrae que este de acuerdo con la lucha militar contra las drogas, es más, estoy total y absolutamente en contra de cualquier salida militar o penal a cualquier problemática social; lo que ocurre es que nuestros paises son incapaces de distanciarse de la política de guerra contra las drogas dirigida desde EEUU y los que terminan pagando los platos rotos son la población, que queda en medio del fuego cruzado entre mafias y policias; por eso digo que si al negocio de las drogas le da la gana asentarse en cualquier país, cualquiera que sea, lo acaba, no porque sea un problema tan grave en sí mismo, sino porque el Estado termina enfrentando el problema como lo obliga la comunidad internacional: con mas violencia.
No me tomen a mal, pero me encanta la superioridad moral con la que opinan algunas personas de los problemas de los otros paises; Colombia es una mierda, no se los voy a negar, pero cuando leo a Zaffaroni no me parece ver que el resto de la región sea un paraiso; eso es lo que nos mata, que entre los mismos latinoamericanos queremos generar un sistema de castas, que lastima.
Por lo visto, la especialidad de algunos es sacar de contexto las afirmaciones e interpretarlas de forma tendenciosa; pero bueno, si sirve de algo aclarar estos dos temas...
el pesimismo de la razón: a votar por Mockus, a persuadir a gente que lo haga, pero anticipando la victoria de la U. Mockus no sólo tendría que lograr alianzas con CR, L, C y P, sino que en 2da vuelta tendrían que votar 17 millones y la diferencia toda para Mockus (!!!). Como habíamos dicho aquí: la ola verde no mojó l ...as urnas: los electores virgenes no votaron, ni se movieron los abstencionistas
se reafirma lo historicamente vivenciado cuando de presidenciales se trata: lo que pone votos decisivos es la clase baja que es manipulada por la política estatal con fondos públicos (programas como "familias en accion", los viejitos no se que...).
el aparato del estado puesto al servicio de una campaña... contra eso no compite nadie...
Comparto totalmente la visión de este cronista argentino en Colombia. Soy argentino y estoy en Colombia hace apenas unos 4 meses... pero ha sido suficiente para compenetrarme mucho con todo este proceso que se vivió. Y realmente estoy sorprendido para bien por varias cosas: la cantidad y calidad de los debates entre los candidatos; la cobertura del periodismo, que exigió discutir sobre las propuestas; la calidad de los candidatos (más allá de que uno gustase más que otro, los colombianos pudieron darse el lujo de tener varias opciones y votar por el que consideraban "mejor" candidato... muy diferente a la típica frustración del votante argentino que se despierta el domingo tratando de descifrar todavía cuál candidato es el "menos peor").
Otro punto que me gustó mucho fue vivir el debate entre la gente... en esto muy probablemente tenga una visión sesgada por los espacios donde participo, pero me pareció que el tema de las elecciones y la comparación de los candidatos estaba en boca de todos, desde facebook, twitter, los comentarios en las páginas de los diarios, hasta en una conversación con el taxista o el mozo.
Otro dato interesante pasa por analizar el fenómeno de Mockus y la ola verde. A mí tampoco no me termina de convencer sus propuestas en muchos temas. Comparado con la claridad de Petro (el inteligentísimo candidato del Polo Democrático, de izquierda), algunas indefiniciones y la forma de expresarse de Mockus deja mucho que desear. Pero uno no podía dejar de admirar su mensaje de "la vida es sagrada", "con educación todo se puede", y su propuesta de combatir la violencia desde lo cultural. Su forma pedagógica y poco tradicional de hacer política, su honestidad, su voluntad de construir sobre lo que ya se hizo, sin pretender refundar todo de cero. Me tocó estar en el acto de lanzamiento de su campaña en la plaza de la Trinidad en Cartagena (en esa plaza se inició la gesta de la independencia)... no fue un acto de campaña, para nada: apareció caminando entre la gente, subió al escenario acompañando de los otros candidatos con que había competido en la interna del partido, y comenzó a hablar del respeto a la vida, de cómo generar confianza entre las personas, de porqué hasta un ladrón merece que se respete su condición de ser humano, etc. Yo había ido por curiosidad, recién me acababa de enterar de quién era este tipo, y quedé gratamente sorprendido. Me pareció una bocanada de aire fresco para muchos que estamos hartos de las formas tradicionales de hacer política. Sin dudas el fenómeno de Mockus es una de las notas importantes de estas elecciones.
El resultado de la primera vuelta fue un golpe para todos los que estamos ilusionados con que haya un cambio en este país, marcado por la desigualdad, la violencia, el conflicto armado, el narcotráfico, el paramilitarismo, las masacres y la supuesta "justicia transicional", los desplazamientos, los "falsos positivos", las "chuzadas del DAS", y otros tantos problemas gravísimos que el estilo de Uribe y Santos parecen encaminados a seguir alimentando. Por mi parte, me gustaría ver que el estilo de Mockus se contagie en otros países.
Pero en fin... las encuestas que ilusionaron a muchos resultaron estar totalmente erradas. La voluntad popular dijo otra cosa... la democracia es así (por suerte), y bueno... sigue siendo preferible tener que esperar otros 4 años a tener que soportar un rey para toda la vida.
Saludos a todos.
Una hipótesis que algunos manejan (aunque nunca supe por qué las hipótesis se "manejan") es que el error de las encuestas no fue tan grande. Las encuestas captaron el momento previo a la veda (si no recuerdo mal, una semana antes de las elecciones), luego de lo cual ya no se podían publicar.
Alguien con quien estuve hoy, y que vio encuestas no publicadas de la semana pasada me comentó que ya había una diferencia más grande, no tanto como la final pero más que unos días antes. Si la hipótesis es correcta, esto marcaba una tendencia.
A lo que, claro, hay que sumarle el peso del aparato del partido de la U, que movilizó a mucha gente.
Abrazos, j.
che, que buenas cronicas, gracias a todos
Luis Enrique Reyes Moreno, algunas aclaraciones también:
No intenté opinar desde alguna supuesta posición de "superioridad moral".
Creo que tiendo a coincidir con vos y no me simpatiza mucho la actitud de los que se creen que pueden indicarle al pueblo de una nación qué debe hacer, a quién debe votar o cómo debe conducir sus propios asuntos.
Tampoco diría nunca "Colombia es una mierda".
Colombia puede ser hermosa por miles de otros razones.
Mi comment no tiene nada nada que ver con los sentimientos nacionales.
"la especialidad de algunos es sacar de contexto las afirmaciones e interpretarlas de forma tendenciosa"
Te pido por favor que releas algunas de las afirmaciones que hiciste en tu comentario (como aquella de que muchos piensan de que "hubiera sido mejor tener una junta militar como la argentina") e imagines cómo otros pueden llegar a entenderlas.
Desde ya, aclaro que no fue mi intención hacer una interpretación "tendenciosa" o "fuera de contexto."
Saludos.
lamento mucho este resultado electoral,resultara dificil revertir en el ballotage.
Para la proxima contienda, Piedad Cordoba debera ser la candidata de una alianza entre PL,PD y el pàrtido verde.Sin unidad opositora ,ya en una primera vuelta,la ultraderecha seguira triunfando
Me sumo a la mirada admiradora de Juan G.B y Juan M. : hasta en europa se vio que lo que estaba pasando en colombia era un verdadero momento politico (lo que cada vez menos suelen ser las elecciones presidenciales), con una real pasion por pensar también lo que hay que heredar o no del uribismo. lei por ejemplo antes de las elecciones que Mockus tenia la posibilidad de ganar justamente cuando la seguridad se volvia un tema segundario en columbia, detras del desempleo (20%). Entonces, queria saber si la victoria "arrolladora" como la llama El pais, ensenia que al final la seguridad se ha vuelto el primer tema de preocupacion para los colombianos? Quizas uno de los Juan (G.B o M.) me podria contestar :-)
Después, lo que me parece una pena, a pesar de todo, y detras de este entusiasmo politico, es su lado lider-oriented. Habria que entender como al final las grandes visiones encarnadas en un hombre siempre acaban por ser las mas politizadas. Por qué se vuelve mas escasa la euforia politica fuera de las grandes convocaciones electorales? esto es una pregunta, y un temor al mismo tiempo: el temor de que se muera lo politico después de la votacion. Claro que me asocio mentalmente por un cierto lado a la frenesi de la discusion politica cuando hay elecciones, pero al mismo tiempo, tampoco me puedo impedir de sentir como una forma de indignacion frente a las condiciones cada vez mas dificil para pensar criticamente en tiempo "normal" por decirlo asi. Quizas me diran que nunca se puede mantener siempre un alto nivel de politizacion, pero incluso asi, rechazo el argumento: si la verdadera politica no es nada mas que pensar su experiencia real (que sean las condiciones laborales, raciales, etc.), parece dificil dejar de actuar politicamente hasta la proxima eleccion.
Está pasando algo increíble. Mockus sigue rechazando el apoyo que le ofrece el Polo, diciendo que sólo acepta apoyo de ciudadanos/as.
Petro, del Polo, intenta convencerlo, señalando la importancia de los partidos políticos para movilizar a la propia ciudadanía.
Los roles están un tanto cambiados. Es notable que Mockus dé tantas vueltas, cuando necesita desesperadamente tantos votos. De dónde más los va a sacar (más allá de intentar convencer a la gente joven que no voto a pesar de estar registrada) no está claro. La cúpula del partido conservador ya está gestionando un acuerdo con Santos. Arañará un par de puntos porcentuales de los votos de Vargas Lleras, pero necesita desesperadamente el voto del Polo.
El Polo se los va a dar igual, mayoritariamente, pero es muy increíble que Mockus tenga esta actitud.
Tanto para decir de Mockus como candidato.
j.
Publicar un comentario