18 jul 2014

Riquelme

El más grande (y lo dice un hincha de Rácing) se va a Argentinos Juniors, demostrándole a la torpe dirigencia de Boca el tamaño de sus miserias. Nota interesante sobre el pase, acá

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Perdoname Roberto pero el miserable siempre fue Riquelme. Ejemplo elocuente, dramático y ostensible de mal compañero y de un jugador absolutamente egoísta. No entiendo muy bien tus palabras. Riquelme es la negación del tipo de ciudadano en el que vos pensás en tus escritos. Es la representación cabal del egoismo llevado al futbo.

Anónimo dijo...

disculpame roberto, fanatismo a un lado, te crees que vale 2.300.000 USD por año ?

Anónimo dijo...

Un tipo que no quiere hacer pretemporadas, que no quiere entrenar, que juega un par de partidos por años y encima quiere cobrar una fortuna en USD y rechaza cualquier cláusula que le exija un mínimo de partidos jugados. Boca es una asociación civil, cuando el presidente protege el patrimonio del club, protege el patrimonio de los socios.

Anónimo dijo...

Los adoradores de Riquelme me recuerdan a los de Maradona. El tipo puede hacer cualquier canallada y siempre van a encontrar la forma justificarlo.

rg dijo...

de que canallada hablas? pareces k en el afan por embarrar a todos. no aceptar pagarle a la hinchada? renunciar a la seleccion de diegote? pelearse con la horrenda dirigencia de boca?

Anónimo dijo...

Falcioni, Palermo, Orión, el ingeniero Pellegrini, Van Gaal, Barros Schelotto, Macri, el presidente del Villarreal,el paraguayo Cáceres, etc, etc, etc. Es una pobre víctima incomprendida.

Ah, y me gustaría saber si por "horrenda" dirigencia de Boca incluís a Macri, porque te guste o no, fue la dirigencia más exitosa de la historia de Boca.

rg dijo...

no es una pobre vícitma. es un tipo con algún principio, en un ambiente horrendo, que incluye a la dirigencia de todos los clubes, antes y ahora, con macri a la cabeza, porque no se trata de ganar títulos sino de no robar con el fútbol y la violencia del fútbol

GerardoD dijo...

No estar de acuerdo con la generalidad de la dirigencia del fútbol, no significa para nada consentir a Riquelme. Sus supuestos principios no los veo: un tipo complicado en el vestuario, camarillero, egoísta, haragán para entrenar, siempre preocupado por tratar de hacer ver que la culpa de que él no renueve (esta vez y las anteriores) es/era pura y exclusivamente de los dirigentes y/o técnico de turno.