25 sept 2010
Anular la Ley de Autoamnistía
Hoy Clarín publica un interesante suplemento sobre los 25 años del juicio a las juntas. Me invitaron a escribir algo sobre el tema, recordando sobre todo la participación de Carlos Nino en el diseño del mismo. Decidí hacer algo sobre su decisiva contribución para invalidar la Ley de Autoamnistía impulsada por el dictador Bignone -un hecho para mi extraordinario y que, cabe recordarlo, Luder y su partido, en ese momento, consideraban "imposible". Acá va la versión de lo que escribí, y que hoy se publica (va acompañada la nota, también en el diario, por foto de parte del "grupo Nino"):
Me han invitado a la difícil tarea de reflexionar acerca de lo que fue la "arquitectura jurídica" diseñada por Carlos Nino (junto con otros valiosos juristas y filósofos del derecho), para el juzgamiento de las violaciones masivas de derechos humanos cometidas por la última dictadura militar. Conocí algo de dicho trabajo en mi carácter de asesor, admirador, pero también crítico de la obra de Nino, una tarea que compartí con un reducido núcleo de (entonces) jóvenes, con muchos de los cuales sigo vinculado por lazos de silenciosa amistad.
La tarea que entonces emprendieron (los méritos son todos de ellos) me resulta todavía admirable y, a la luz de acontecimientos más actuales, difícil de comprender: ¿qué hacía un grupo de filósofos tan cerca del poder, cuando el poder estaba acosado por el fantasma permanente de un nuevo golpe de Estado? ¿Y qué hacía el poder tomando tan entrañablemente en serio las palabras de un grupo de filósofos, situados siempre más cerca de los principios que de la política? Las relaciones entre el entonces candidato presidencial Raúl Alfonsín y el grupo de los filósofos no fueron pacíficas: hubo disenso, reproches mutuos, dudas acerca de cómo vincular los principios con la política. Era posible -es posible.
Podría intentar decir algo acerca de varias de las cuestiones jurídicas que estaban en juego, pero prefiero concentrarme en una sola de ellas, que fue la primera y, para mí también la más importante, a la vez que una de las menos recordadas. Se trata de un tema de importancia histórica, en cuya resolución Nino jugó un papel decisivo. Me refiero al caso de la derogación de la ley de autoamnistía. Para quienes no lo recuerdan: el 23 de septiembre de 1983, mientras cobardemente abandonaban el poder, y a cinco semanas de las elecciones democráticas, el general Bignone, entonces presidente en ejercicio, promulgó la ley 22.924, a través de la cual la Junta Militar impuso una amnistía general destinada a cubrir todas las acciones subversivas y antisubversidas cometidas entre el 25 de mayo de 1973 y el 17 de junio de 1982. La amnistía amparaba a todos los que hubieran ayudado o incitado a tales acciones, y protegía también a quienes pudieran ser imputados por delitos militares comunes realizados en aquellos años.
Las implicaciones de la ley de autoamnistía resultaban descomunales: ella venía a hacer simplemente imposible el juzgamiento de los gravísimos abusos cometidos por los militares. En efecto, el artículo 2 de nuestro Código Penal dice que los imputados deben ser juzgados a partir de "la ley penal más benigna," lo cual implicaba que ninguna ley dictada por el nuevo gobierno democrático podría hacer posible ningún juzgamiento: los militares ya habían sido perdonados. La legislación promulgada por la dictadura, en su propio beneficio, parecía poner obstáculos irreparables a cualquier atisbo de justicia democrática.
El campo político-jurídico argentino, entonces, apareció dividido en dos secciones fundamentales (hubo, en realidad, tres facciones, si es que tomamos en cuenta a un grupo minúsculo, liderado entonces por Álvaro Alsogaray y su partido -la Unión del Centro Democrático- que celebró el dictado de la ley de autoamnistía). Por un lado, se encontraba una parte importante de la clase política argentina, encabezada por Ítalo Luder, quien era el líder y candidato presidencial del partido entonces mayoritario, el peronismo, y que consideraba jurídicamente inviable la derogación de la ley de autoamnistía dada la existencia del citado artículo 2 del Código Penal. Es una gran lástima -nos decían- pero el juzgamiento de los militares no resulta posible. Los militares están perdonados y nosotros no podemos sino respetar esa ley de amnistía.
Frente al grupo citado, se encontraba otra sección muy numerosa de la política argentina, que se manifestaba en contra de la ley autoamnistía. Este grupo, que incluía a dirigentes políticos y a militantes por los derechos humanos, se enfrentaba sin embargo con un gravísimo problema: cómo hacer para oponerse a la ley de autoamnistía (por entonces, "la ley más benigna")? El derecho no parecía ofrecerles ninguna salida.
Fue allí donde la acción del grupo de los filósofos realizó, según pienso, su contribución más espectacular para la moralización de la vida pública argentina. Una parte de dicho grupo, encabezada por Genaro Carrió (quien moriría pocos años después, como tantos justos, sumido en una profunda tristeza) propuso una primera solución posible, digna y lúcida como era su estilo: el artículo 20 de la Constitución -sostuvo Carrió- prohíbe el otorgamiento de facultades extraordinarias al Ejecutivo, y lo que ha hecho Bignone, al dictar la ley de autoamnistía, es violar ese fulminante mandato de la Constitución. En otros términos, al dictar la autoamnistía, el Ejecutivo se ha autoarrogado funciones propias del Legislativo, a la vez que, en ejercicio de ellas, le ha impedido al Poder Judicial toda intervención en la materia. Nos encontramos frente a una situación claramente inconstitucional: la impermisible suma del poder público.
Uno no puede sino agradecer la solución propuesta por Carrió en aquellos días. Sin embargo, esa notable solución empalidece frente a la respuesta ideada por Nino. Reflexionando sobre la ley de autoamnistía, Nino consolidó entonces las bases de una teoría del derecho y de la democracia nuevas, que contribuyeron a tirar abajo años de dogmatismo arcaico y bibliotecas enteras de un positivismo autoritario.
Lo que sostuvo Nino fue más o menos lo siguiente: decir que una ley, como la de autoamnistía está vigente, no es lo mismo que decir que la ley de autoamnistía es una ley válida. Una ley, por tanto, puede tener la fuerza de la coacción detrás -puede estar vigente, entonces, como lo estuvieron cada una de las normas dictadas por los gobiernos de facto- pero resultar, a la vez, una norma perfectamente inválida. Una ley dictada por un gobierno militar puede tener plena vigencia, entonces -como lo sostuvieron, una y otra vez, uno tras otro, vergonzosamente, nuestros tribunales- pero a la vez tratarse de una norma moralmente inválida, y como tal, de una norma que, nosotros, como ciudadanos, no tenemos ninguna razón para obedecer.
¿Y qué es entonces lo que, según Nino, otorgaba validez a una ley? Muy simple: la validez de una ley proviene del hecho de ser una norma originada en una discusión democrática, sin excluidos. Sólo las normas nacidas de la democracia podían gozar, para él, de la presunción de ser válidas. Sólo las normas democráticas podían reclamar nuestra obediencia. Nosotros, ciudadanos democráticos, tenemos razones para aceptar ese tipo de normas, porque sólo de ellas podemos considerarnos, razonablemente, sus autores, y no sus esclavos. La ley de autoamnistía, entonces, como cualquier otra norma dictada por la dictadura, no podía reclamar la dignidad que es propia de una ley con origen democrático.
A principios de diciembre de 1983, el electo presidente Raúl Alfonsín se dirigió al pueblo para anunciar una serie de medidas fundacionales, entre las que figuraba la anulación de la ley de autoamnistía. Las razones que citó Alfonsín fueron dos principales: la autoamnistía implicaba la violación del artículo 29 de la Constitución (el argumento de Carrió) y carecía de toda presunción de validez, por ser una ley de facto y, como tal, moralmente inaceptable (el argumento de Nino).
Muy poco tiempo después, el Congreso democrático decidiría, como primera medida, la derogación de la ley de autoamnistía, votada en forma unánime por absolutamente todas las fuerzas reunidas en la legislatura.
Nino fue el gran jurista progresista de nuestra democracia. Su teoría sobre la validez de las normas fue (¿la?) contribución decisiva, que permitió derogar la ley de autoamnistía e hizo posible la inauguración de los históricos juicios por los derechos humanos. Su contribución no sólo ayudó a derribar la autoamnistía, no sólo confrontó el nefasto legado creado, en su momento, por la propia Corte Suprema -la doctrina de facto- sino que además permitió que el derecho democrático argentino recuperara su dignidad como tal, después de décadas de sigiloso compromiso con los gobiernos militares.
De estatura baja, contextura frágil y salud endeble, asmático, Nino fue el primer jurista que se puso de pie para desafiar al pensamiento dogmático del autoritario positivismo argentino. Para todos nosotros, sus discípulos, la lección quedó marcada a fuego: el derecho no está separado de la política, sino unido a ella; el derecho y la política no están separados de la moral, sino que deben formar parte de una unión inseparable, eterna.
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23 comentarios:
Me interesó el argumento de Nino sobre las normas "perfectamente invállidas". Cuales serían los criterios de aplicación? Es necesario unsa fuerza tan poderosa como "un gobierno de facto" o puede suceder en democracia?
Es necesario que sean leyes "importantes" para el estado o pueden ser "pequeñas" como decretos municipales?
el escribe sobre el tema en un librito que no se si se consigue facilmente, la validez del derecho, de astrea. yo trate de seguir alguna de tus preguntas en de la injusticia penal a la justicia social
Además de vos y Nino, ¿quienes están en la foto? La nota no está online.
esta genaro carrio, que ya estaba muy mal animicamente, mal de salud; esta carlos balbin, actual camarista; esta roberto de michele; marcelo alegre...
De no creer, muy fuerte el relato.
Un gusto leer sobre una persona donde creo convivió una genuina y filosófíca búsqueda de la verdad (basta ver su fundamentación constante y haciendo oído a otras voces, incluso las contrarias)con una fuerte convicción a la hora de llevar a la práctica sus razonamientos. Sin poner excusas respecto de las posibilidades que el poder podía o no otorgar. En base a principios en los que creía y se había dedicado a fundamentar.
Un saludo
Nino siguió la línea de filosofía analítica de SADAF (Carrió, Alchourrón, Bulygin, etc.) sumando sus ideas traídas de europa/USA de revalorización del debate sobre el deber ser ("Introducción..." "Los límites..." son maravillosos, "Ética y Ds. Hs..." un poco denso) Fue brillante y generoso con sus ideas. Tal vez nunca quiso entender al peronismo y siguió la linea liberal gorila en la visión de la Argentina del S. XX (se ve en "Fundamentos..." q igual tiene partes muy interesantes).
Un tema en el q Nino fue precursor fue la democratización de la radiodifusión: ¿qué diría de una CS heterodoxa q está por confirmar SIN DAR RAZONES q una Ley Antimonopolio NO SE APLICA al monopolio?
anónimo 2:45. me ayuda a entenderlo desarrollando un poco más sobre qué sería lo que, en sus palabra, tal vez nino no quizo entender (del) peronismo?
sobre su afirmación de que Nino habría seguido la "línea liberal gorila", me perece que entiende mal la reconstrucción de nino. Precisamente en Fundamentos critica largamente a la línea liberal gorila, en términos morales y constitucionales, precisamente por no ser valiosmaente liberal (y usted sabe, seguramente, que se refiere a liberalismo político), a la luz de los déficits -el más importante, el relativo a la autonomía- de esa dimensión gorila.
grosa la foto!
Un placer leer este post del día de la fecha, debo decir que el relato de los hechos me produjeron emoción y gran satisfacción. Aguante Nino!!!
la única mujer de la foto es gabriela alonso??
la mujer es susana, una de las secretarias que trabajo con el grupo. faltaban marcela rodriguez, o de otros tiempos, m. gianzone, s. alvarez, g. alonso...
Gustavo, gracias por su referencia:
1.- en "Fundamentos..." hace una referencia histórica a dos líneas, una liberal democrática (los buenos con algunos "déficits") Vs. otra nacionalista/católica/oscurantista (los malos) y así va hasta 1983, q es pobre para una inteligencia como la de Nino. No refiere al irigoyenismo ni al peronismo por sus avances sociales. Poco dice de los rec. nat. (minería e hidrocarburos), dato relevante en la historia constitucional: el golpe del 30 es porque I. iba a federalizar el petróleo, Perón lo pone en la Const./49, la del 57 lo omite, etc.). Su relato del 55/56/57/etc. es parcial por lo q omite y si lo compara con los adjetivos q no se priva de asignar al peronismo es gorila. (hasta elogia a Boffi Boggero por una disidencia sin decir que votó por el consejo de guerra a huelguistas).
La analogía de la práctica y las catedrales, la reconstrucción teórica de los debates sobre los derechos individuales (autonomía, libertad de expresión, etc.) es, efectivamente, excelente, propia de su talento.
2.- Ahora Ud: Nino escribió sobre radiodifusión ¿q diría de una Corte q niegue efectos a una ley del Congreso antimonopólica sin dar fundamentos más que formales; lo pondría en la tradición liberal/democrática?
sobre 2., lo primero que haria nino es dejar de lado juicios tan apresurados: evaluar una corte por una decision en el peor de los casos debatible
de todos modos, no solo escribio sobre radiodifusion, sino que elaboro un proyecto de ley de medios hiper democratica, antimonopolica, orientada a asegurar la presencia de multiples voces
No esta Carlos Rosenkratz en la foto?
ilustrativo y conmovedor... hay mucha gente buena ahora en america latina... pero no un nino: gran estatura! siempre recomendada la introducción de Garzón Valdes al libro en su homenaje (Eudeba)
Anónimo, ¿podés aclarar el significado que le asignás al término "gorila"? Me parece que esta aclaración es clave para determinar si tus críticas a Nino son o no acertadas.
rosenk, j. saran, a la derecha de la pantalla
Anonimo: hay mucho para decir, porque, como la entiendo, su pregunta es muchas preguntas:
1.- nino abogó por la introducción de acciones de clase -ver un país al margen....-, por lo que intuyo que una clase de decisión judicial de alcance amplio no sería en principio un problema -aunque dependería de cómo sigue la cosa luego de la decisión, etc. etc.-
2.- por otro lado, cualquier decisión judicial no basada en razones serias, usted lo sabe, merecería su crítica directa.
3.- sobre la sustancia concreta de la materia en litigio, las posiciones, compromisos y propuestas de nino son públicas y son lo mejor que se ha generado en nuestra historia democrática, a mi modo de ver, basta con visitarlas para sentir el placer de ver lo correcto.
4.- ahora bien, en su pregunta también hay -iimplícitamente- una reconstrucción sobre lo quela corte planearía hacer que en sí mismo lleva a la respuesta. Aunque antes de acmopañarlo debería yo saber si la corte fallará una acción colectiva o individual, si resuelve sobre una medida cautelar o sobre el fondo y si resuelve sobre toda la ley o sobre una o algunas normas en particular....y luego ver las razones sustantivas, formales, etc. etc. que proporcione...esas variables pueden hacer que sus presuposiciones en la pregunta sean correctas o inadecuadas, y no tengo info sobre lo que la corte tiene y lo que hará...así que me temo que deberé esperar hasta darle una opinión sobre lo que pienso que se podría decidr desde la perspectiva teórica de nino (hasta donde yo la pueda reconstruir).
saludos pues, y será hasta luego de que la corte hable
1. Usé "g." respetuosamente y sin mala fe, como el sentimiento antiperonista q dificulta considerar objetivamente los progresos q el peronismo trajo. Como tiene "carga valorativa negativa" no fue buena elección. perdón y lo retiro. El tema es, además, marginal en su obra.
Nino enseñaba a pensar críticamente el derecho y la moral, y era admirable su consideración por las ideas de los demás. Creía realmente en las bondades del debate x eso creo que homenajearlo es discutir respetuosamente sus ideas... ¡tendría que haber sido peronista!
2. Ley de Medios. Gracias Gustavo y RG x los comentarios. La ley de Nino era muy interesante. Creo recordar q él estaba en contra de los multimedios pero no surge del proyec. del CCD. Aun así desde los 80 NADIE impulsó seriamente el debate: aprovechemos hoy!
Ok, no nos apresuremos, pero no parece q haya q esperar al fallo para opinar, vamos a llorar sobre lo inmodificable: una plancha 280 q garantiza a Clarín su imperio (según Clarín ya está...).
Gustavo: sabemos q NO se trata de una acción de clase, sino de la cautelar de Clarín contra la desinversión dictada por el fuero Civ y Com Fed antes de la reglamentación con argumentos vagos y frases hechas como la mayoría de la cautelares. El grupo con posición dominante es Clarín y él plantea la demanda: su derecho de acción no es el debate.
El debate es si una Ley sancionada con DEBATE y MAYORÍAS puede dejar de aplicarse por un fallo que NO DA RAZONES.
Aun razones malas o discutibles, pero no argumentos formales. ¿Cómo debatir razones q no se expresan? Sería lo peor para la democracia.
Si la Justicia toma una decisión contramayoritaria (la excepción) debe expresar claramente los motivos o resulta un comportamiento autoritario.
Roberto, tuvieron en aquellas epocas tan complicadas, en medio de amenazas serias de un nuevo golpe, el apoyo del matrimonio Kirchner? Que decian entonces Nestor y Cristina? Estaban con la autoamnistia?
Muy bueno el relato, siempre son bienvenidos ese tipo de entretelones. Sólo una cuestión, Nino fue el primero que se puso de pie para enfrentar al positivismo autoritario argentino? Creo que esa afirmación es un poco injusta para Enrique Marí y toda la escuela crítica, que ya a principios de los 70' había escrito Neopositivismo e ideología, por ejemplo.
si, tenes razon que mari merece ser mencionado. yo lo pensaba sobre todo por el tema del apoyo juridico a la doctrina de facto, pero si
si no entiendo mal, la idea de centrar el analisis en los terminos "vigencia y validez" es atacar la auto-amnistia en su origen y declararla nula ex nihilo, por tanto, se salva el problema de la "ley penal mas benigna" ya que vigente pero no válida, no puede invocarse en la defensa.
saluti, emilio ardiani
Una parte importante de las ideas de Nino sobre el tema de los medios de comunicacion se encuentran en el proyecto / dictamen del Consejo para la Consolidacion de la Democracia. La edicion es de eudeba.
varios de los supuestos sobre concentracion del dictamen se relacionaban con las resoluciones de la FCC del momento que restringian alternativas de combinacion de titularidad de diversos medios en un mismo ambito territorial - en parte - a partir de un techo de audiencia potencial local y nacional.
Desde luego, en 1985 los calculos
se hacian en base a radio, tv y prensa escrita.
Me pregunto si tales supuestos se sostienen hoy frente a las nuevas tecnologias de comunicacion, en las cuales el alcance territorial de los medios impresos puede tener una incidencia mucho menor frente a los medios electronicos en sus diversas variedades.
En cambio me pregunto si a pesar de los cambios tecnologicos, los supuestos del dictamen en cuanto a la gobernanza de la radio / TV publica se mantienen de todos modos.
No entiendo bien que quiere decir que Nino no quiso entender al peronismo.
Nino era una persona tan brillante como desprovista de prejuicios de toda naturaleza. Dipuesto a discutir cualquier idea, examinarla, debatirla, refutarla y aun volver sobre sus pasos si descubria algo en su razonamiento que pudiera requerir una mejor fundamentacion.
Hay una sola cosa que Genaro Carrio y Eduardo Rabossi le reprochaban regularmente a Nino no entender: lo que era una cancha de futbol y en particular lo que significa ver a Boca en la bombonera.
Roberto, gracias por esta nota.
Saludos,
Roberto
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