9 feb 2011
La tesis de la discontinuidad
Hace tiempo, y por tomar un ejemplo, defendimos la acusación y posterior destitución de Aníbal Ibarra (político por el que no teníamos especial antipatía), luego de la tragedia de Cromagnon. El principal argumento que dimos era simple: Si, teniendo la oportunidad de descentralizar el poder, decidía seguir concentrando todas las decisiones relevantes en sus propias manos, luego, perdía el derecho a quejarse si se lo hacía responsable jurídicamente por los trágicos eventos que pudieran sucederse en su gobierno (para el caso que nos interesaba, hechos que su gobierno no supo evitar, pudiendo hacerlo).
Dicho esto, volvamos al presente. Hace tiempo que caen acusaciones gravísimas en torno al gobierno. Sin ir más lejos, hoy, el procesamiento del recaudador de la campaña del Frente para la V, relacionado con la venta de medicamentos falsos, malversación de caudales públicos, y, sin dudas, para nosotros, con los resonantes casos de narcotráfico de los que nos anoticiamos recientemente. Si algunos de estos hechos son ciertos, luego, volveremos sobre la misma línea de reflexión que presentamos en el caso Ibarra. En otros términos, vamos a rechazar -como ya rechazamos- la tesis de discontinuidad que presentan los defensores del gobierno. Ellos nos dicen (como acaban de hacerlo frente al tremendo caso León Juárez): Si hay represión en la Provincia, es tema de Buenos Aires, y no del gobierno nacional; si hay represión en Formosa, Neuquén, Salta, o Santiago del Estero, la responsabilidad es de los locales, y no del gobierno nacional. Si hay corrupción en los Jaimes y De Vidos, se trata de casos individuales y no de la responsabilidad del gobierno nacional. No. En un sistema de poderes híper (recontra) concentrados, toda la responsabilidad jurídica deberá recaer sobre los que -tenemos que asumirlo- dan las órdenes o dejan de darlas.
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17 comentarios:
me extraña que un jurista de tu talla defienda semejantes ficciones. Si tu tesis triunfara los presupuestos de la responsabilidad del estado adquirirían una extensión tan amplia que cualquier cosa que ocurra dentro del territorio nacional podría serle atribuida al estado. Incluso debería responsabilizarse al estado hasta por los hechos más nimios -no digo que los que mencionás lo sean- y más alejados de las esferas de mando.
¿Si un ministro insulta a otra persona también debería responder el estado nacional por la alta concentración de poder presidencial?
Tampoco es cierto que en la Ciudad de Buenos Aires el poder haya estado tan centralizado. Es quizás el ámbito territorial en donde la distribución de poder es más equitativa que en el resto del país. Si lo comparás con feudos como San Luis y las provincias norteñas y sureñas, esto es claro.
Por otro lado, defender la payasada procesal que destituyó a Ibarra implica transformarte en un profesor de derecho INconstitucional. Me extraña, sinceramente me extraña.
f.
bueno, que no te extrane tanto. te cuento que (el caso es obviamente muy distinto, pero el principio es el mismo), se trata del argumento que permitio la condena a las juntas. obvio que no se condena a videla porque camps insulte (en ese caso, la hipotetica condena debe caer sobre camps), pero si por las torturas que cometio camps pero que consintio, ordeno, o no persiguio videla.
la replica es obvia: esto no es una dictadura. ya se. tampoco lo sugiero. pero quitemos la idea de dictadura y volvamos sobre la responsabilidad juridica en una estructura verticalizada
Payasada jurídica que este mismo gobierno propició (pues le soltó la mano a Ibarra). Recordar el voto de Elio REbot.
La irresponsabilidad de la cúpula del gobierno en los actos de corrupción no deriva de que sea inaplicable la tesis de rg, sino de la circunstancia de que los jueces han decidido poner un techo a la investigación. Así Jaime y compañía aparecen como solitarios corruptos, cuando en realidad nunca podrían haber realizado los actos que se les imputan de no haber sido de que gozaban de una estructura estatal y una apoyatura superior que se lo facilitaba y ante cuya jefatura rendían cuentas.-
Eduardo
Se sale de su post, pero quiero dejar un comentario para felicitarlo por su blog, que veo muy muy interesante.
Lo he encontrado googleando su nombre después de leer una nota de usted en un libro que me ha ayudado bastante.
Desde el lunes estoy leyendo tantos de sus posts como puedo y también me está siendo muy bueno como estudiante aunque no estudie para abogado.
Desearía que blogs como el suyo se hicieran en México.
Saludos desde el Distrito Federal mexicano de parte de Henio Calzada.
epa, gracias a vos henio, abrazo grande
Si bien el planteo de la entrada tien un registro netamente jurídico, me permitiré salir de él, a pura insolvencia jurídica de mi parte. Pero sobre la cuestión de fondo no pueden quedar dudas, desde un análisis político las responsabilidades son de aquel que tiene más poder y lo utiliza nombrando funcionarios, mandando leyes al parlamento, tomando decisiones de política pública. Es descabellado el argumento de los kirchneristas según el cuál Cristina es la dueña de sus hipotéticos aciertos y totalmente ajena a sus evidentes desastres. Sin más acuerdo que éste, lo que dice Castillo en el reportaje que destaca rg es rotundamente cierto.
Roberto, me parece que el ejemplo del Juicio a las Juntas que vos citás valida la tesis opuesta a la tuya. Fijate que aún siendo una dictadura en donde quedaba obviamente mucho más claro el punto de la centralización del poder en la cabeza del dictador, no se aplicó la propiedad transitiva que vos postulás que hubiera significado la condena a priori del dictador por el sólo hecho de serlo, sino que hubo que probar la existencia de un plan sistemático y de responsables por zona en forma descendente, fijate que el Ministro del Interior de la dictadura Harguindeguy no fue acusado ni condenado por pertenecer al gobierno y no a probarse que formara parte de ese plan.
Por otra parte aún si (aunque me parece muy simplificado tu argumento)diéramos por bueno que al interior de cada jurisdicción nacional y provinciales el poder está concentrado al punto que vos señalás, no me parece que se aplique un análoga dependencia y concentración de poder de la jurisdicción nacional sobre las provinciales. Concretamente no creo que el gobierno nacional deba ser responsabilizado a priori como vos postulás por las políticas de seguridad implementadas por los provinciales. Distinto es que vos valores negativamente la política de seguridad del gobierno nacional (y que argumentes porqué)y que esa valoración coincida con la que tengas sobre el gobierno provincial en cuestión pero no es apriori, es argumentando sobre el caso específico
Con el mismo argumento, te podrían juzgar a vos por escribir para diarios que no respetan la libertad sindical ni los derechos laborales. Hacete cargo de las cosas que hacés, no sos un inocente palomita...
Marche una milanesa para el anónimo del último comentario! Milanesas para todos!
anonimo--diego, justamente es al reves, la responsabilidad va para arriba en estructuras centralizadas. y por lo demas, claro que cada uno se debe hacer responsable por las cosas que hace (daba el ejemplo de camps), pero -insisto, en una estructura centralizada- no por las que no hace. y ademas, una cosa es la responsabilidad moral, otra la responsabilidad juridica de la que aca hablo, asi que papa fritas para vos
andres. me interesa lo que decis. de todos modos, en estructuras verticalizadas hay presunciones y conexiones mas sencillas de probar. si debiera refinar el argumento, como hay que hacerlo, diria que el gob nacional es politicamente responsable por lo que ocurrido en formosa, y juridica-penalmente responsable por el tema financiamiento de su campania, y las coimas en obras publicas
Yo estaba de acuerdo con RG. Las milanesas kirchneristas eran para el que bardeaba anónimamente, ya que todo kirchnerista militante debe acceder a un premio consuelo nac & pop (obvio que los premios mayores se los llevan los pingüinos gordos, pero shhhhhhhhhh, porque decirlo es hacerle el juego a la derecha). Hasta la milanesa, siempre! Nestor not dead!
Me parece que la responsabilidad en casos como el de Formosa o José León Suarez podría existir únicamente a nivel político, en el sentido de que los responsables son aliados del gobierno, pero de ninguna manera a nivel jurídico. El Ejecutivo Nacional no posee ningún control sobre, p. ej, la policía formoseña, por ende, no puede ser responsable sobre sus acciones.
Respecto a los casos de corrupción, deben probarse las conexiones que demuestren que exceden el ámbito de lo personal y que se extienden a lo largo de todo el PEN. No conozco ninguna investigación periodística que me parezca seria para un caso como el de De Vido que no se encuentra imputado en ninguna causa.
Además si "En un sistema de poderes híper (recontra) concentrados, toda la responsabilidad jurídica deberá recaer sobre los que -tenemos que asumirlo- dan las órdenes o dejan de darlas.", Cristina sería responsable de todos los actos realizados por cualquier agente de una estructura administrativa (desde el nivel comunal hasta el nacional), inclusive de aquellos pertenecientes a distintos partidos políticos. El problema es que tu razonamiento no tiene en cuenta las jurisdicciones... para dar órdenes o dejar de darlas hay que ser la autoridad competente.
Respecto a los juicios a los genocidas, desconozco los argumentos del juicio a las juntas, pero actualmente se puede juzgar de manera ascendente porque se considera que hubo un PLAN SISTEMÁTICO de desaparición de personas y, por ende, terrorismo de Estado. Con tu razonamiento, lo que separaría a Scioli de Videla serían los números (López y Arruga vs. 30.000) y nada más.
Como militante kirchnerista, no puedo dejar de reconocer las responsabilidades políticas de aliados del gobierno en casos de los que nombrás, pero hay que saber diferenciar. En el caso de Scioli, yo (al igual que gran cantidad de compañeros kirchneristas) no concuerdo en lo más mínimo con su política de seguridad, pero puedo reconocer que ni él ni su estructura político-partidaria tienen total control sobre las acciones de la bonaerense. El problema es en los hechos todos los actores tienen cuotas de poder, y no sólo aquellos que indica la ley.
Más allá de que no coincido en gran parte con tus planteos, y que de a ratos resultás un poco chicanero(lo cual es parte de la discusión política) e intolerante hacia cualquier tipo de apoyo al kirchnerismo, tus opiniones me parcecen interesantes y desafiantes.
saludos diego, disculpa cualquier malentendido, y abrazo a don matias
totalmente de acuerdo Roberto, y agrego, cualquiera que haya estado mínimamente cerca de decisiones políticas sabe que los ministros de obras públicas, o "el" hombre de esa área que sea el elegido son los que hacen el manejo de la caja negra (no es la única, como el caso Capaccioli muestra)con lo que siempre terminamos en el tema del financiamiento (ilegal) de la política y los favores que se devuelven después.
Con esto quiero decir que es inverosímil que las personas que ocupan esos lugares jueguen para sí mismas y no para un equipo, nadie es tan ingenuo y esto es sistemático.
Esto vale tanto para K/Cappaccioli/De Vido como para Menem/todos, Macri/todos, De la Rúa/Gallo, Alfonsín/Nosiglia, etc..
totalmente de acuerdo Roberto, y agrego, cualquiera que haya estado mínimamente cerca de decisiones políticas sabe que los ministros de obras públicas, o "el" hombre de esa área que sea el elegido son los que hacen el manejo de la caja negra (no es la única, como el caso Capaccioli muestra)con lo que siempre terminamos en el tema del financiamiento (ilegal) de la política y los favores que se devuelven después.
Con esto quiero decir que es inverosímil que las personas que ocupan esos lugares jueguen para sí mismas y no para un equipo, nadie es tan ingenuo y esto es sistemático.
Esto vale tanto para K/Cappaccioli/De Vido como para Menem/todos, Macri/todos, De la Rúa/Gallo, Alfonsín/Nosiglia, etc..
asi lo veo, andres
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