7 feb 2012

Brevísimas españolas V. Bienvenido Mr. Garzón




* Es muy impresionante escuchar-ver los testimonios de (los parientes de) las víctimas del franquismo. Tienen tanto importante por decir, luego de tanto tiempo! Tienen tanta necesidad de decir, luego de todo lo que ha pasado (y sobre todo, todo lo que no se ha hecho)! Y además: son tan reveladoras de lo que era España, las historias que ellos cuentan; son tan reveladoras de la actual España, las premuras de muchos por que no las cuenten –premuras hoy revestidas de imprecaciones contra el  juez Garzón.

* En materia de empleo, España se ha convertido en el juego de la silla. Las sillas se van retirando una a una y con ellas se va extendiendo un pánico visceral. Los integrados de este mundo parecen a salvo, y el resto se sostiene a flote merced a una combinación de subsidio estatal y contención familiar. El ámbito académico no resulta en absoluto inmune al cambio, y así es que escucho, por primera vez, cantidad de historias de colegas jóvenes que arman sus maletas y parten. Notable: en un par de días encuentro el caso de una colega española que se marcha a trabajar a Cali, Colombia; otro que se va a Brasil; uno que retorna a la Argentina; y otro español que va a buscar empleo a la Universidad de Paraguay. Caramba.

* Pensando en la falta de empleo, me acuerdo de un reportaje público armado, televisado en vivo, previo a las elecciones. En él, el actual jefe de gobierno, Mariano Rajoy respondía a preguntas de jóvenes españoles. Una de las primeras cuestiones que se le plantean es obvia, una pregunta cantada: “Qué va a hacer usted con el problema del desempleo juvenil?” Pasan los segundos y Rajoy no responde. Se lo ve a Rajoy buscando nerviosa, desesperadamente, entre sus notas. Luego de un largo rato responde que es increíble, que tiene la respuesta escrita, pero que no la puede dar porque no alcanza a entender su propia letra. El hecho es extraordinario.

* Alberto Ruiz-Gallardón, ex Alcalde de Madrid (y que interpreta a su tío abuelo, el compositor Isaac Albéniz, en la próxima película del irregular José Luis Garci), resultó ascendido a Ministro de Justicia, como recompensa por su desempeño madrileño. Apenas ha llegado a su cargo y su programa ya exhibe dos botones de muestra: la puesta en marcha de una campaña para desmantelar las normas vigentes, en materia de aborto; y la activación de otra, destinada a endurecer fuertemente las penas contra los menores que cometan delitos. La derecha no es salvaje: la derecha lleva el rifle a cuestas para disparar contra aquellos a los que considera salvajes.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Garzón? Psss...
Una maestro, quizo investigar los crímenes del franquismo cuando no quedaba nadie a quien condenar pero hace diez años desestimó las denuncias por las matanzas de Paracuellos de Jarama, cuyos responsables estaban vivos -S. Carrillo por caso-.
Pasa que unos eran de derecho y otros de izquierda...
Hernán

Eduardo dijo...

Tratemos de precisar un poco sobre la actuación del Juez Garzón:
Con relación al juzgamiento del pasado, en España se aprobaron primeramente dos leyes de amnistía, en 1976 y en 1977, esta última por el parlamento democrático obtuvo 296 votos afirmativos, 2 negativos y 18 abstenciones, y se basaba en una estructura que buscaba: reconciliación como objetivo, consenso como programa y olvido como instrumento.-
Siempre se respetaron esas amnistías y otras disposiciones que se fueron aprobando para complementarla a lo largo de los años, tan es así que en diciembre de 1998, cuando una asociación de familiares y amigos de las víctimas del genocidio de Paracuellos del Jarama –ocurrido en noviembre de 1936- (*) solicitaron al Juez Baltazar Garzón que juzgara a los responsables de esa matanza, el magistrado entendió que: “Con el respeto que merece la memoria de las víctimas, no puede dejarse de llamar la atención frente a quienes abusan del derecho a la jurisdicción para ridiculizarla y utilizarla con finalidades ajenas a las marcadas en el artículo 117 de la Constitución Española y los artículos 1 y 2 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, como acontece en este4 caso, los preceptos jurídicos alegados son inaplicables en el tiempo y en el espacio, en el fondo y en la forma de los hechos que se relatan en el escrito y su cita quebranta absolutamente las normas más elementales de retroactividad y tipicidad y que los hechos estaban prescritos al haber transcurrido más de veinte años», que la amnistía del 25 de noviembre de 1975 veda cualquier posibilidad de reiniciar la persecución penal por los actos de nuestra Guerra Civil, y que el delito de genocidio no se encontraba tipificado en España en los albores de la Guerra Civil y tampoco existía en el Derecho Internacional”, rechazando la querella.
Ese expediente fue agregado a la denuncia contra el juez que terminó con su suspensión, como una prueba de su prevaricato, cuando ordenó investigar sobre las matanzas cometidas por el franquismo.-
(*)Sobre este hecho ver: Reig Tapia, Alberto. Memoria de la Guerra Civil. Los mitos de la tribu. Alianza. Madrid. 2000. Págs. 225 y sgts.
Eduardo Reviriego

Anónimo dijo...

Pero còmo robertito, no estabas en contra del punitivismo vos?

rg dijo...

claro salamin, por eso elogio los testimonios, que es lo que me interesa. te gana el apuro por contradecirme

gemeloscocteau dijo...

con toda la curiosidad del mundo y el interés en tu opinión...cual es tu posición acerca de la condena a garzon?
gracias.